Ayudar, apoyar, orientar, estructurar, desarrollar a jovenes

por Brenda

Aviso Importante: Esta iniciativa puede encontrarse en fase de idea. Será responsabilidad de las personas con interés en hacer una simulación de inversión de carácter informativo exclusivamente, el darle seguimiento al emprendedor, hacer el correspondiente análisis legal y financiero, y de llegar a un acuerdo entre las partes, concretarán la intensión de participación realizando la aportación económica directamente en la cuenta bancaria de la iniciativa. Las aportaciones económicas para esta iniciativa no se realizan a través de Inixar. Inixar no es una institución tecnológica financiera, sólo facilita el acercamiento entre personas.

La juventud en nuestra sociedad necesita de un apoyo moral, cultural y social, valorando su participacion quiero desarrollar este sector

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Sobre este Proyecto


~Hola!

Soy Brenda Navarro, todos me llaman Brenda, tengo 43 años, nací en Monterrey Nuevo León, la mayor parte de mi vida la desarrolle en Escobedo, y actualmente sigo viviendo aquí, ya con hijos, una carrera de Ingeniero Industrial Administrador, y una Maestría de Psicoterapia Breve Sistémica Enfocada en Soluciones, lo cual, más que profesionalmente me ha ayudado en mi persona, con mis hijos y principalmente en mis relaciones familiares y de pareja.

Como pasatiempos… saciar mi curiosidad; me gusta leer, investigar, soy muy observadora y consiente de mí y de mi medio. Soy empática al sufrimiento de los demás, lo que me pone en posiciones en extremo evidentes de rechazo o aceptación, por defender lo que considero justo.
Mi lema: Fuerza, Fortaleza, Claridad y Justicia, dentro de la Lealtad y el Respeto mutuo. Lo que me ha llevado a soñar con la igualdad de respeto a la existencia de todos, a la diversidad de ideales y creencias. Y principalmente a la búsqueda de hacer sentir a los demás que su valor en este mundo va más allá de vejaciones y padecimientos. Mi pasión es hacerles ver que todos somos valiosos y apreciados, y lo suficientemente hermosos en nuestra esencia y existencia, como para disfrutar de los detalles bellos de la vida y la naturaleza. Que merecemos respeto, aceptación y cuidado.

De niña no recuerdo haber tenido algún sueño, vivía  al vaivén de las circunstancias de los mayores. Alejada de mis padres ya que tenían que trabajar, quedaba al cuidado de familiares. Entre semana, no veía a mis padres más que sábado por la tarde y domingo por la mañana; pase por muchas cosas de las cuales no tengo buenos o bonitos recuerdos… abusos, desdén, mal trato, entre otras cosas. Mi hermano 3 años más pequeño, estuvo a mi cargo por así decirlo, hasta que volvimos a convivir con mis padres.
Mi hermano tenía 4 y yo 7 cuando regresamos a la casa de mis padres, solo para ver que no era un matrimonio armonioso, tenían muchos matices disfuncionales, ver llorar a mi madre y cierto machismo de mi padre, me hizo sentir impotente y a la vez aislada y sola. De alguna manera mi Espíritu se mantuvo firme, sosteniéndome y permitiéndome disfrutar de los buenos momentos que llegue a tener al lado de mi familia. Sin embargo dentro de esto cabe destacar que mis padres siempre lucharon (y hasta la fecha) dentro de sus capacidades por que tuviéramos techo y comida, además de darnos lo mejor para nuestro bienestar, estudio, tranquilidad, ellos realizaron su mejor esfuerzo, y eso se los reconozco como hija y se los agradezco como persona.

Dentro de los que he leído y escuchado, obtengo ideas y esclarezco pensamientos, y me reflejan de alguna manera en mis experiencias. Un extranjero que conocí, menciona molesto y visiblemente enojado, que “el pueblo mexicano vive en el victimismo y además le gusta”, otro nos tacha de “tontos”. Sin embargo, culturalmente es una tendencia impuesta a través del tiempo. Sabiendo lo limitante que puede ser este sentimiento, no quiero escuchar a otras personas hablar así, sin saber.
Lo que a cada uno de nosotros como individuos nos tocó vivir. Es cierto que necesitamos reformar nuestra cultura, es cierto que hay que encontrar valor en lo que somos y en lo que tenemos, también es cierto que tuviéramos la fuerza necesaria para hacerlo, pero también es cierto que muchos de nosotros estamos cansados, agobiados, lastimados, a veces hundidos en pozos profundos de desesperación, de abandono, ahogados sin poder respirar, por las condiciones diarias de vida.
Es por eso, que mi sueño, es auxiliar a personas, dentro del ámbito psicosocial, quiero ayudar a identificar las capacidades inherentes en cada uno, los talentos natos e innatos individuales, sacarlos a relucir, aceptarlos y utilizarlos para el beneficio de cada uno según sus respetables capacidades. Quiero darle una oportunidad a aquel que no conoce, a aquel que no tiene, a aquel que quiere una palabra de aliento.

Quiero diseñar programas de apoyo en desarrollo personal, enfocado a la juventud, a los que están solos mientras los papas trabajan, una distracción a aquel que piensa que el mundo es pequeño, una mano, una escucha, una compañía al que cree que no lo merece.
Diseñar programas de orientación a padres, devolverles la confianza del bienestar, tranquilidad y de la salud mental, que a veces reconforta y otras alivia. Quiero establecer charlas que unan ideas y pensamientos, para que se conozcan, se entiendan y a la vez respeten, quiero que todos los que participen se conozcan y se acepten como son, que se compartan.

Con esto quiero generar oportunidades para que la sociedad sanee sus expectativas sociales y de convivencia. Para que haya jóvenes productivos, funcionales, satisfechos y felices. Hoy por hoy, sabemos los índices y niveles de violencia, a nivel personal, familiar, social y físico. Si aprendemos a reconocer nuestras frustraciones, las trabajaríamos y reestructuraríamos  nuestra personalidad, con la finalidad de ser mejores en conciencia y desarrollo.
Para esto quiero arrancar mi idea creando una asociación con este fin, y quiero establecer un espacio para iniciar operaciones, crear un ambiente que me permita ofrecer los programas, dentro de un medio acorde a lo que se requiere transmitir. 

Dentro de las opiniones de diferentes personas, unas dicen que mostrarle a los niños limitados económicamente un ambiente diferente, vivo y divertido, les enseña que hay algo más para buscar en lo cotidiano, y los impulsa a buscar un cambio dentro de su desarrollo. Otras que las condiciones limitantes familiares bloquean las capacidades de los integrantes. Las limitaciones, pueden ser variadas: económicas, culturales, creencias, salud, educativas, de experiencia o de relación. Así que creo que hay mucho campo en lo que todos podemos ayudar.

Por lo pronto mi grano de arena lo quiero colocar así en este mundo, ojala resuene, ojala crezca, ojala alguien más crea que esto es posible, ojala que alguien quiera ayudar. Mi espíritu tiene fe.
Para eso requiero de su ayuda, quiero arrancar con esto en enero o febrero del 2020, según los recursos, y mi meta de recaudación es de $ 300,000.00, trescientos mil pesos, quiero:
• Terminar una construcción, en donde pueda recibir dar los servicios de ayuda y apoyo.
o Ya que solo cuenta con paredes, requiere techado de aproximadamente 90 m2 y levantamiento de segunda planta.
• Habilitar áreas y espacios, sacar permisos de establecimiento y local
o Ventanas, acabados, pintura, perímetro y seguridad.
• Realizar las instalaciones necesarias para su funcionamiento
o Instalaciones y servicios básicos (agua, luz, teléfono)

Mi retribución, será poner mis conocimientos y experiencia al servicio y alcance del público en general que los solicite, bajo condiciones de crecimiento y fortalecimiento de la causa, aunado a los contactos profesionales que gustan de mejorar la salud psicosocial y que también ponen a disposición sus habilidades y talentos. Verdaderamente el impacto para generar salud en la sociedad, no tiene precio, tiene satisfacciones, y aunque no todos las apreciemos por igual, el beneficio es de todos.
La oportunidad de otorgar un grano de arena por parte de todo aquel que crea que esta idea es posible está abierta. El apoyo u ayuda que podamos compartir nos fortalecerá como individuos, y también el de nuestros hijos, familiares y amigos. Lo que necesitamos es confianza.

- Si nunca sanas lo que te irió, sangraras sobre personas que nunca te cortaron